FUENTE INAGOTABLE DE LUZ

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¡ILUMÍNANOS!

Sagrados Corazones Unidos del AMOR SANTO

Sagrados Corazones Unidos del AMOR SANTO
Sagrados Corazones de Jesús y María, unidos en el amor perfecto,

viernes, 19 de diciembre de 2014

San Miguel Arcángel

Primera aparición de San Miguel Arcángel sobre el Monte Gargano


San Miguel Arcángel en el MonteGargano8 de mayo del año 490
Poderosa y majestuosa se eleva hacia el cielo luminoso la cima rocosa del Monte Gargano, dominado con soberbia las colinas que le rodean. A sus pies ondea el Mar Adriático, con su inmensa belleza azul.  Hasta el siglo quinto, la cima estaba recubierta de un bosque tupido e ignorada por todo el mundo. Pero en el año 490 nació la aurora de su inmortal gloria, Su fama sobrepasó los confines de Italia, resonó en todo el mundo y comenzó a atraer a sí Papas, Emperadores, Príncipes reinantes, nobles y pueblo de todas las naciones. ¿Qué sucedió?
Leamos la narración original del antiguo libro del “Liber pontificalis” de la Curia Romana.
Bajo el gobierno del Papa Felice y del Emperador Zeno, un día de aquel siglo tan lejano, un noble y muy rico señor del Monte Gargano, que se llamaba también Gargano y era el propietario de aquella montaña, desapareció su toro más bello de grandeza superior. Después de tres días de búsqueda, decidió ir personalmente a buscarlo. Después de algunas horas de una búsqueda angustiosa, con gran estupor encontraron a la bestia de rodillas en la entrada de una caverna inaccesible. El patrón, viendo la imposibilidad de salvarlo, quiso matarlo con una flecha envenenada. Pero ante la maravilla de todos, la flecha regresó e hirió a quien la había lanzado. El patrón cayó sangrando al suelo y los siervos asustados lo fajaron de prisa y lo llevaron a su casa en Siponto, que actualmente es una fracción de Manfredonia.
La noticia de lo ocurrido se divulgó rápidamente en el pueblo y se convirtió en el único objeto de las conversaciones. Bajo la impresión de este extraño hecho, todos fueron a visitar al Obispo San Lorenzo Maiorano, primo del emperador Zanone, para consultarle.
El Santo Obispo, después de una breve reflexión ordenó que toda la población haga ayuno y oraciones durante tres días, para encontrar gracia ante Dios y para conocer el significado de dicho prodigio. Al alba del tercer día, que fue precisamente el 8 Mayo del año 490, el santo prelado, sumergido en su oración nocturna, de repente vio ante sí a un Ángel más esplendoroso que el Sol que iluminó el ambiente y le dijo:
“Yo soy el Arcángel Miguel que continuamente está la presencia de Dios. Deseando que este lugar se venere en toda la tierra y sea privilegiado, quise probar con ese acontecimiento insólito, que todo lo que se obra en este lugar, sucede por Voluntad Divina. Es Dios que me ha constituido PROTECTOR y DEFENSOR de este lugar”.
A la mañana siguiente el Obispo comunicó el celestial mensaje a los habitantes de Siponto. El pueblo, lleno de alegría y de gratitud por dicha aparición, bajo la guía de San Lorenzo Maiorano se encaminó en una devota procesión hacia la cima del Gargano para venerar la caverna milagrosa. Cuando regresaron a Siponto veían con alegría la prodigiosa curación del Señor Gargano y se congratulaban con él por el santo privilegio concedido por el Cielo, de tener en sus tierras el Palacio Real terrenal del Gran Príncipe San Miguel Arcángel.
Hoy el ateísmo se secularizante ha invadido también a la mansión terrenal de San Miguel Arcángel. Desde hace años ninguna Autoridad civil va a presenciar como en el pasado el culto en las Fiestas con los dones simbólicos de la ciudad. La gran sueca, Santa Brígida visitando la Gruta de San Miguel, en uno de sus éxtasis oyó el canto celestial de los Ángeles, el cual terminó con la dolorosa y profética visión de la decadencia de su culto.
Transcribo fielmente las palabras angélicas:
“Bendito seas oh Señor
Por habernos creado como vuestros mensajeros
Y como apoyo del hombre
Del cual nos confiaste la custodia.
¡Hacia el hombre Tú nos enviaste
Sin ni siquiera privarnos de Vuestra Visión!
Haz visible la dignidad
Con la cual Tú nos has revestido
Para que se aprenda a tomar en cuenta nuestro ministerio:
¡aunque aquí, también hoy este Santuario declina
Y los del lugar parece que prefieren, en vez de nosotros, a los ángeles sin luz!”.
Una aguda tristeza llenó el corazón de Santa Brígida que aumentó desmesuradamente cuando, apareciéndoseleJesús le dijo:
“Los ingratos se darán cuenta de la pérdida que hacen al olvidarse de los Ángeles, en la hora de la prueba”.

Segunda aparición de San Miguel Arcángel sobre el Monte Gargano


San Miguel Arcángel en el MonteGargano19 de septiembre del año 492
Odoacre, rey de los Erulos, viendo la paz y el bienestar tranquilo de Sipondo bajo el sabio gobierno del Santo Obispo San Lorenzo Maiorano, decretó soberbiamente la conquista. Los habitantes de Siponto recurrieron nuevamente al consejo de su Obispo.  Lleno de confianza con la ayuda del Príncipe Celestial, San Lorenzo ascendió nuevamente al Monte sagrado.
Entre lágrimas y gemidos suplicó a San Miguel por su protección. Llegó el mes de Septiembre:  los godos, seguros de su propia fuerza, intimidan a los sipontines para que se rindan. Entonces San Lorenzo ordenó nuevamente tres días de ayuno y de oración. Aconsejó a sus Capitanes que obtengan del Rey Odoacre tres días de tregua. Todos redoblaron las súplicas y penitencias en honor de San Miguel.
Al alba del 19 de Septiembre, San Lorenzo fue a la Iglesia de Santa María, antigua catedral de Siponto. Sumergido en una profunda oración, vio que se le apareció nuevamente el Príncipe Miguel, que ordenó al santo Obispo que ataque a los godos en la hora cuarta del día. Diciendo esto, desapareció. En la hora establecida, rayos, truenos, terremotos, obscuridad impidieron la avanzada del enemigo. Los godos, temblorosos, sin perder un minuto, buscaron la salvación en la fuga, abandonando todo en el campo.
Los pocos que escaparon a los flagelos del Cielo fueron perseguidos y vencidos por los sipontines. Para agradecer convenientemente por esta estrepitosa y milagrosa victoria, San Lorenzo dirigió una nueva procesión a la sagrada Caverna sobre la cima del Monte Gargano.

Tercera aparición de San Miguel Arcángel sobre el Monte Gargano


San Miguel Arcángel en el Monte Gargano29 de septiembre del 493
Para festejar devotamente el tercer aniversario de la aparición de San Miguel, el santo prelado subió en una alegre procesión con todos los fieles a la cima del Gargano. Cuando llegaron a la Gruta, nadie se atrevía a entrar por santo temor y reverencia, y después de un breve descanso, todos regresaron a Siponto. Para actuar en todo según el plan del Cielo, San Lorenzo decidió pedir consejo al Santo Padre Gelasio I sucesor del Padre Felice por la cuestión de la consagración de la gruta.
El Papa Gelacio I dio orden a siete Obispos de los alrededores que se reúnan en Siponto y que con tres días de oraciones comunitarias y ayuno, suplicaran al Arcángel Miguel que se digne manifestar la Voluntad de Dios con respecto a la consagración de la Sagrada Gruta.
San Miguel acogió dichas súplicas humildes y confiados y en la noche del tercer día, rodeado de una luz radiante, el Príncipe Celestial se apareció por tercera vez a San Lorenzo y dijo:
“NO ES NECESARIO QUE USTEDES CONSAGREN ESTA GRUTA, PORQUE YO ELEGI A MI PALACIO REAL, YO MISMO LO HE CONSAGRADO ASISTENCIA, ELEVADA ORACIONES Y CELEBRADO EL SANTO SACRIFICIO, PARA COMUNICAR AL PUEBLO. ES A MI QUE ME CORRESPONDE MANIFESTAR COMO HE CONSAGRADO ESTE LUGAR”.
A la mañana siguiente San Lorenzo narra a los Obispos y al pueblo la nueva visión y el mensaje celestial del Arcángel. Con el corazón lleno de júbilo, Obispos y fieles entre oraciones y cantos, van en procesión hacia la cima, como cuenta el Código Vaticano. Algunos de los Obispos tenían una edad muy avanzada y San Miguel quiso ir al encuentro de ellos con un gesto de exquisita cortesía. Por lo tanto mandó a cuatro águilas de una grandeza desmesurada: dos de ellas con las alas desplegadas defendían a los peregrinos de los rayos del sol, y las otras agitaban como si fueran un abanico las alas procurándoles una agradable frescura a los Obispos y al pueblo.
Pero otros grandes y nuevos prodigios esperaban a los santos Obispos en el ingreso de la Caverna sagrada. En la gruta sobre un bloque de piedra encontraron una huella de San Miguel Un altar preparado por San Miguel y recubierto con un palio purpurino. El altar tenía en el centro una cruz de un cristal purísimo. Todo testimoniaba en la gruta que su consagración fue hecha divinamente. Entonces San Lorenzo presentó a Dios el primer Santo Sacrificio en presencia de todos los Obispos y de todo el pueblo.
Podemos creer plenamente que en esta solemnidad estuvo presente también la gloriosa Reina de los Ángeles para renovar su ofrecimiento al Eterno Padre, como hacía en aquel siglo tan lejano sobre el Monte Calvario. Quien mejor que Ella podía agradecer a la Santa Trinidad por los favores concedidos a esta parte de la tierra, unidos con las olas del mar en la tierra Santa.

La cuarta aparición de San Miguel Arcángel sobre el Monte Gargano


San Miguel Arcángel en el Monte Gargano22 de septiembre de 1655
En el año 1655 se desató la peste en todo el Reino de Nápoles. Foggia casi se despobló y la muerte negra cobró despiadadamente también entre los habitantes del Monte Gargano. El peligro para Manfredonia y en Monte S. Angelo fue grande. El Obispo, Mons. Giovanni Alfonso Puccinelli, constatada la ineficacia de los medios humanos, recurrió a la poderosa protección e intercesión de San Miguel Arcángel.
Por lo tanto fue en un devoto peregrinaje penitencial con el clero y con el pueblo a la Sagrada Gruta. Después de largas oraciones, lágrimas y gemidos, al alba del 22 de Septiembre, el Obispo vio aparecer al Arcángel en un enceguecedor esplendor, y dijo al Obispo:
SEPA OH PASTOR DE ESTAS OVEJITAS, QUE HE OBTENIDO DE LA SANTISIMA TRINIDAD QUE CUALQUIERA QUE UTILIZA VERDADERA DEVOCION LAS PIEDRAS DE MI GRUTA, ALEJARA DE SU CASA, DE LA CIUDAD Y DE CUALQUIER LUGAR LA PESTE, NARRAD A TODOS ESTA GRACIA DIVINA. VOSOTROS BENDECIREIS LAS PIEDRAS, ESCULPIENDO SOBRE ELLAS LA SEÑAL DE LA CRUZ CON MI NOMBRE”.
Como perpetúa memoria de este grande y nuevo prodigio y como perenne gratitud a San Miguel el pueblo del Monte S. Angelo erigió un obelisco sobre la antigua plaza de la ciudad, que todavía existe, como recuerdo de este hecho histórico, con la siguiente inscripción:
“AL PRINCIPE DE LOS ANGELES
VENCEDOR DE LA PESTE
PATRON Y TUTELAR
MONUMENTO
DE ETERNA GRATITUD
ALFONSO PUCCINELLI”.
Sería muy provechoso restablecer la fabricación de la insignia de San Miguel según el modelo que él ha indicado. Aunque no sea contra la peste que él ha indicado. Aunque no sea contra la peste del cuerpo, convendría que sea con la tremenda peste de las almas, causadas por la ignorancia religiosa y por la destrucción de familia cristiana y por el triunfo general de la Leyes inicuas contra la Ley Eterna de Dios. Antes de la creación visible en la Mente de Dios existía inmutable la ley para cada especie de seres futuros, comprendida también la naturaleza humana.
Fuente: Libro ¿Quién es San Miguel Arcángel? de Gloria Crux.

viernes, 7 de noviembre de 2014

Escéptico neurocirujano después del coma: "Vi a Dios y el paraíso."

Un descreído neurocirujano estadounidense asegura haber visitado el paraíso y haber visto a Dios tras haber permanecido en coma durante una semana como resultado de una meningitis.


Un escéptico neurocirujano -hasta entonces- de EE.UU., Eben Alexander, que cree haber visto a Dios mientras estaba en coma en una experiencia cercana a la muerte, ha explicado su historia en detalle en el programa 'This Morning', informa 'Mirror'. 

Había almas bailando y orbes dorados que dejaban atrás unos rastros brillantes   
Alexander ha dicho que cuando entró en coma como resultado de un ataque de meningitis bacterial hace seis años solo tenía un 10% de posibilidades de recuperación. "Los médicos dicen que no había ninguna manera de que pudiera recobrar cualquier tipo de conciencia, por no hablar de recuperarme, pero lo hice a las ocho semanas". 

No obstante, el médico no solo se recuperó, sino asegura que las experiencias que vivió durante aquellos días cambiaron su vida. En concreto, dice que le ayudaron a entender mejor el cerebro, la mente y la conciencia. 
 
El neurocirujano describe que se despertó con una luz blanca y una melodía, y vio un valle lleno de vida abundante y fértil, con flores y árboles que florecían. Añade que "abajo había almas bailando y orbes dorados que dejaban atrás unos rastros brillantes". 
 
Asimismo, el neurocirujano también asegura haber visto a Dios durante esta experiencia, aunque no fue "el hombre con barba blanca", como todos solemos imaginarlo. "Esta deidad está más allá de cualquier palabra, hay una sensación irresistible de aquella presencia amorosa e infinita". 
 
Curiosamente, antes de sobrevivir al coma el neurocirujano se mostraba claramente escéptico respecto a este tipo de 'viajes'. En concreto, había afirmado que "mi conocimiento sobre el cerebro me dejó bastante seguro de que las experiencias fuera del cuerpo que ocurren durante experiencias cercanas a la muerte, son alucinaciones que surgen cuando el cerebro sufre un trauma". 

Alexander ha añadido que los médicos no han podido explicar su experiencia con los parámetros de la ciencia. "Dijeron que debería haber sido un truco de un cerebro moribundo, aunque este es el misterio. ¿Cómo tuve una experiencia tan rica cuando la parte humana de mi cerebro estaba tan devastada?". 




Texto completo en: http://actualidad.rt.com/sociedad/view/145661-neurocirujano-esceptico-ver-paraiso-coma

lunes, 27 de octubre de 2014

Oraciones de Protección



«Señor Jesucristo, Hijo del Padre, envía ahora Tu Espíritu sobre la Tierra. Haz que el Espíritu Santo habite en el corazón de todos los pueblos, para que sean preservados de la corrupción, de las calamidades y de la guerra. Que la Señora de Todos los Pueblos, que un día era María, sea nuestra Abogada, amén.»


ESCUDO DE SAN PATRICIO (oración exorcista)
Me envuelvo hoy día y ato a mí una fuerza poderosa, la invocación de la Trinidad, la fe en las Tres Personas, la confesión en la unidad de Creador del Universo.
Me envuelvo hoy día y ato a mí la fuerza del Cristo con su Bautismo, la fuerza de su crucifixión y entierro, la fuerza de su resurrección y ascensión, la fuerza de su regreso para el Juicio de Eternidad.
Me envuelvo hoy día y ato a mí la fuerza del amor de los querubines, la obediencia de los ángeles, el servicio de los arcángeles, la esperanza de la resurrección para el premio, las oraciones de los patriarcas, las profecías de los profetas, las predicaciones de los apóstoles, la fe de los mártires, la inocencia de las santas vírgenes y las buenas obras de los confesores.
Me envuelvo hoy día y ato a mí el poder del Cielo, la luz del sol, el brillo de la luna, el resplandor del fuego, la velocidad del rayo, la rapidez del viento, la profundidad del mar, la firmeza de la tierra, la solidez de la roca.
Me envuelvo hoy día y ato a mí la fuerza de DIOS para orientarme, el poder de DIOS para sostenerme, la sabiduría de DIOS para guiarme, el ojo de DIOS para prevenirme, el oído de DIOS para escucharme, la palabra de DIOS para apoyarme, la mano de DIOS para defenderme, el camino de DIOS para recibir mis pasos, el escudo de DIOS para protegerme, los ejércitos de DIOS para darme seguridad, contra las trampas de los demonios, contra las tentaciones de los vicios, contra las inclinaciones de la naturaleza
contra todos aquellos que desean el mal de lejos y de cerca, estando yo solo o en la multitud.
Convoco hoy día a todas esas fuerzas poderosas, que están entre mi y esos males, contra las encantaciones de los falsos profetas, contra las leyes negras del paganismo,
contra las leyes falsas de los herejes, contra la astucia de la idolatría, contra los conjuros de brujas, brujos y magos, contra la curiosidad que daña el cuerpo y el alma del hombre.
Invoco a Cristo que me proteja hoy día del veneno, el incendio, el ahogo, las heridas, para que pueda alcanzar yo abundancia de premio.
Cristo conmigo, Cristo delante de mí, Cristo detrás de mi, Cristo en mi, Cristo bajo mi, Cristo sobre mi, Cristo a mi derecha, Cristo a mi izquierda, Cristo alrededor de mi. Cristo en la anchura, Cristo en la longitud, Cristo en la altura, Cristo en la profundidad de mi corazón. Cristo en el corazón y la mente de todos los hombres que piensan en mi, Cristo en la boca de todos los que hablan de mí, Cristo en todo ojo que me ve, Cristo en todo oído que me escucha.
Me envuelvo hoy día en una fuerza poderosa, la invocación de la Trinidad, la fe en las Tres Personas, la confesión de la unidad del Creador del Universo.
Del Señor es la salvación, del Señor es la salvación, De Cristo es la salvación.
Tu salvación Señor esté siempre con nosotros.
Amén

ORACION A SAN MIGUEL ARCÁNGEL
San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla. Sé nuestro amparo contra la perversidad y las asechanzas del demonio. Reprímale Dios, te pedimos suplicantes. Y tú, oh Príncipe de la Milicia Celestial, arroja al infierno con el Divino Poder a satanás y a todos los espíritus malignos que andan dispersos por el mundo para la perdición de las almas.
Amén.

ALMA DE CRISTO
Alma de Cristo, santifícame.
Cuerpo de Cristo, sálvame.
Sangre de Cristo, embriágame.
Agua del costado de Cristo, lávame.
Pasión de Cristo, confórtame.
Oh buen Jesús, óyeme
y dentro de tus llagas escóndeme.
No permitas que me aparte de Ti.
Del enemigo, defiéndeme;
en la hora de la muerta, llévame
y mándame a ir a Ti,
para que con tus santos te alabe
por los siglos de los siglos.
Amén

ORACIÓN DE PROTECCION I
Yo (di tu nombre completo) con la Sangre preciosa de Jesús, protejo y sello todo mi ser, interior y exteriormente, deposito en el Corazón Inmaculado de la Virgen María, todo mi haber y poseer; para que ni en el presente, ni en ningún momento futuro, lleguen a ellos daños por venganzas de lo oculto.
En el nombre de Jesús, queda prohibida toda acción e interacción, toda comunicación e intercomunicación espiritual. Invoco la presencia de los ángeles, arcángeles (Miguel, Gabriel y Rafael), principados, virtudes, potestades, dominaciones, querubines, serafines y tronos de dios; para que sean ellos quienes lleven a cabo esta batalla contra el mal.
Pido la ayuda de la comunión de los santos.
Amén, amén, amén.

ORACION DE PROTECCIÓN II
Santo Dios, Santo fuerte, Santo inmortal, por los tres dulces nombres líbranos Señor, de todo mal. (3)
Santísima Trinidad bendita, Dios soberano y eterno,
Líbranos de las prisiones y las penas del infierno,
La cruz y los tres clavos y él Señor que murió en ella,
Hablan y respondan por mí.
Amansa los corazones que vengan sobre de mí,
Yo sin Dios, no quiero nada, yo con Dios lo que se viviere,
Vengase por delante, vengase quien se viniere, por los tres dulces nombre de Jesús, Maria y José.

SELLAMIENTO CON LA SANGRE DE CRISTO
Padre celestial, en unión con el espíritu santo pido que el poder de la sangre preciosa de Jesús me cubra, selle, guarde, proteja, sane, libere, guarde, y me de vida en abundancia en todo mi ser, en mi familia, mi historia, mis bienes, las personas que dispones a mi lado, tu voluntad sobre mi vida, mi trabajo, mi estudio y mi vida social, los lugares en que vivo y visto y la creación entera.
Tu sangre preciosa me libre de las tentaciones y de todo mal.
Ahora y en la hora de mi muerte. Amen

ORACIÓN DE LA SANGRE DE CRISTO
Señor Jesús, en tu nombre y con el Poder de tu Sangre Preciosa sellamos toda persona, hechos o acontecimientos a través de los cuales el enemigo nos quiera hacer daño.
Con el Poder de la Sangre de Jesús sellamos toda potestad destructora en el aire, en la tierra, en el agua, en el fuego, debajo de la tierra, en las fuerzas satánicas de la naturaleza, en los abismos del infierno, y en el mundo en el cual nos movemos hoy.
Con el Poder de la Sangre de Jesús rompemos toda interferencia y acción del maligno.
Te pedimos Jesús que envíes a nuestros hogares y lugares de trabajo a la Santísima Virgen acompañada de San Miguel, San Gabriel, San Rafael y toda su corte de Santos Ángeles.
Con el Poder de la Sangre de Jesús sellamos nuestra casa, todos los que la habitan
(nombrar a cada una de ellas), las personas que el Señor enviará a ella, así como los alimentos y los bienes que Él generosamente nos envía para nuestro sustento.
Con el Poder de la Sangre de Jesús sellamos tierra, puertas, ventanas, objetos, paredes,  pisos y el aire que respiramos, y en fe colocamos un círculo de Su Sangre alrededor de toda nuestra familia.
Con el Poder de la Sangre de Jesús sellamos los lugares en donde vamos a estar este día, y las personas, empresas o instituciones con quienes vamos a tratar (nombrar a cada una de ellas).
Con el Poder de la Sangre de Jesús sellamos nuestro trabajo material y espiritual, los negocios de toda nuestra familia, y los vehículos, las carreteras, los aires, las vías y cualquier medio de transporte que habremos de utilizar.
Con Tu Sangre preciosa sellamos los actos, las mentes y los corazones de todos los habitantes y dirigentes de nuestra Patria a fin de que Tu Paz y Tu Corazón al fin reinen en ella.
Te agradecemos Señor por Tu Sangre y por Tu Vida, ya que gracias a Ellas hemos sido salvados y somos preservados de todo lo malo.

PROTECCIÓN, CIERRE DE MENTE
Por el poder de nuestro Señor Jesucristo, por el poder de su preciosísima sangre, por el poder del nombre de Jesús, cierro mí mente, mí alma, mí espíritu y mí entorno, mí pasado, mí presente y mí futuro, lo que soy y seré y tendré, todos los seres de la creación a mí familiares más cercanos.
Lo alto, lo bajo, lo ancho y lo angosto, el norte, el sur, oriente, el occidente, todos los seres y animales y elementos de la creación.
Por el poder de la Santísima Trinidad rompo, desato, exorcizo y quebranto todo ataque del enemigo y aura corruptora que quieran tener ventaja sobre mí, me cubro con la sangre, llagas, sagrado corazón de nuestro amado Jesucristo.
Ato mí mente y cierro con toda mí fuerza, mí interior, que solo esta abierta para el amor de Dios, expulso y pongo en fuga, toda perturbación mental, manifestación satánica, brujería, infestación y vejación.
Mando y ordeno por la fuerza del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo a todos los espíritus burlones y demoníacos que busquen atormentarme, envíalos Señor Jesucristo a tres mil millas a la redonda, para que ninguna perturbación este presente en mí ser; Ordeno por el nacimiento humilde en el pesebre de nuestro Dios Jesucristo, por su vida, predicación, pasión, martirio, muerte y resurrección triunfante, que salga de inmediato de este sitio todo espíritu maligno y plagiario. Por la intercesión de la más que bendita y Santa siempre virgen Maria y del poder y el fuego del Espíritu santo dador de vida y de purificación.
Invoco la protección de los Santos del paraíso, entre mí y el enemigo, la serpiente antigua. Me refugio e invoco la Santa presencia de Miguel Arcángel príncipe de los ejércitos celestiales, de Rafael Arcángel, alto comandante de las hueste celestiales, de Gabriel Arcángel el mensajero preferido de Dios y dador de buenas noticias, de Uriel Arcángel, sabio entre los Ángeles y el Ángel del Señor mensajero de la paz, nuestro Ángel custodio protector de nuestra alma y cuerpo, para que por permiso de Dios protejan nuestra vida de todo mal y peligro, daño procedente del maligno, librándonos de peligros y catástrofes.
Me uno con la creación del universo y con el amor divino de Dios, soy el amor de Dios y estoy en los brazos del padre celestial y ningún mal llegara a mí o mí casa, ni a mí familia, nunca tocaran mis posesiones materiales e espirituales.
El poder, el éxito y la prosperidad esta en mí camino y abro mis brazos y extiendo mis manos con fe, para recibir los manjares y bendiciones del reino de los cielos.
Los Ángeles de Dios van delante de mí y de mis pies, para que no tropiecen, por la promesa de nuestro salvador Jesucristo que venció a la muerte en la cruz.
Me protejo, me cierro y me lleno del poder supremo de Dios y del universo, siendo una criatura nueva y renovada por la sangre del cordero, la sangre de Cristo, fuente de vida, corre por mí interior como ríos de agua viva, fuerte y poderosa, indómita, por el poder trasmitido por Dios a sus hijos amados; Deshago, desligo, ahuyento todos mal y espíritu de miseria, pobreza, tristeza y amargura, se libera mí corazón de toda atadura que tenga, de odios, rencores, resentimientos y sufrimientos. Los rallos divinos de Dios, invaden mí interior llenándome de paz y seguridad.
Dios creador de todo el universo, Dios poseedor y creador de la vida, Dios quebrantador de la muerte y del infierno, me entrego a ti en este momento, en cuerpo alma espíritu y mente, renuncio y rechazo a Satanás y todos sus poderes y dominios, pues e sido adquirido por la sangre de cristo y tus promesas son eternas.
Saldré adelante de los sufrimientos y las adversidades, pues tú eres un Dios poderoso que das a tus hijos lo mejor y en abundancia. Que derramas tú amor por la humanidad, tú generosidad no tiene limite y por eso en este momento te alabo y te glorifico y te doy gracias de todo corazón ¡mil veces gracias!, ¡mil veces glorias!, aunque sea pecador tú has tenido misericordia de tu siervo N.N, librándome de todo mal y peligro y fortaleciéndome, llenándome de tú amor, poder, prosperidad y mucha abundancia.
Amen.

Oración exorcista a la Preciosa Sangre de Cristo

Señor Jesús, en Tu Nombre, y con el poder de Tu Sangre Preciosa sellamos toda persona, hechos o acontecimientos a través de los cuales el enemigo nos quiera hacer daño.
Con el Poder de la Sangre de Jesús sellamos toda potestad destructora en el aire, en la tierra, en el agua, en el fuego, debajo de la tierra, en las fuerzas satánicas de la naturaleza, en los abismos del infierno, y en el mundo en el cual nos moveremos hoy.
Con el poder de la Sangre de Jesús rompemos toda interferencia y acción del maligno. Te pedimos Jesús que envíes a nuestros hogares y lugares de trabajo a la Santísima Virgen acompañada de San Miguel, San Gabriel, San Rafael y toda su corte de Santos Angeles.
Con el Poder de la Sangre de Jesús sellamos nuestra casa, todos los que la habitan (nombrar a cada una de ellas), las personas que el Señor enviará a ella, así como los alimentos, y los bienes que El generosamente nos envía para nuestro sustento.
Con el poder de la Sangre de Jesús sellamos tierra, puertas, ventanas, objetos, paredes y pisos, el aire que respiramos y en fe colocamos un círculo de Su Sangre alrededor de toda nuestra familia.
Con el Poder de la Sangre de Jesús sellamos los lugares en donde vamos a estar este día, y las personas, empresas o instituciones con quienes vamos a tratar (nombrar a cada una de ellas).
Con el poder de la Sangre de Jesús sellamos nuestro trabajo material y espiritual, los negocios de toda nuestra familia, y los vehículos, las carreteras, los aires, las vías y cualquier medio de transporte que habremos de utilizar.
Con Tu Sangre preciosa sellamos los actos, las mentes y los corazones de todos los habitantes y dirigentes de nuestra Patria a fin de que Tu paz y Tu Corazón al fin reinen en ella.
Te agradecemos Señor por Tu Sangre y por Tu Vida, ya que gracias a Ellas hemos sido salvados y somos preservados de todo lo malo. Amén.

martes, 16 de septiembre de 2014

ORACIÓN PARA SALVAR MILES DE ALMAS - Acto de Amor -



PRIMERA ORACIÓN

Oración que salva miles de almas

En el nombre del Padre...,Señor mío Jesucristo...

¡Oh Jesús! yo os pido humildemente me concedáis
la gracia de salvar un alma por cada latido
de mi corazón, unido a los latidos del vuestro
y a los del Corazón Inmaculado de vuestra
Santísima Madre. Os lo suplico por vuestra
Preciosa Sangre y vuestra Divina Misericordia,
salva las almas, sálvalas Señor.

Padre nuestro, Ave María y Gloria.

Extraordinaria promesa de Cristo
“Si me piden salvar un alma por cada latido
de su corazón, se lo concederé a quien
me lo pida” (Mensaje del Señor a los
Siervos del Divino Amor, año 1976).

Nota explicativa: Esta Oración
es válida sólo durante 24 horas ( por esto hay que rezarla todos los días), y se refiere
a la salvación de almas que aún viven.
No es aplicable, por tanto a las almas del
Purgatorio. (Con licencia eclesiástica)

SEGUNDA ORACION
MENSAJE DE AMOR QUE LE COMUNICO EL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS Mensaje de amor que el Sagrado Corazón de Jesús lanza al mundo para salvarlo.
Mientras el mundo se atomiza y desintegra por el odio de los hombres y de los pueblos, Jesucristo quiere renovarlo y salvarlo por el amor.
Quiere que se eleven hacia el cielo llamas de amor que neutralicen las llamas del odio y del egoísmo.
A tal efecto, enseñó a Sor M. Consolata Be
rtrone un Acto de Amor sencillísimo que debía repetir frecuentemente, prometiéndole que cada Acto de Amor salvaría el alma de un pecador y que repararía mil blasfemias.


La fórmula de este Acto es:
"Jesús, María, Os Amo, Salvad las Almas"
 Allí están los tres amores: Jesús, María, las almas que tanto ama Nuestro Señor y no quiere que se pierdan, habiendo por ellas derramado Su Sangre.
Le decía Jesús: "Piensa en Mí y en las almas. En Mí, para amarme; en las almas para salvarlas (22 de agosto de 1934). Añadía: la renovación de este Acto debe ser frecuente, incesante: Día por día, hora por hora, minuto por minuto"(21 de mayo de 1936).
"Consolata, di a las almas que prefiero un Acto de amor a cualquier otro don que pueda ofrecerme"... " Tengo sed de amor"... (16 de diciembre de 1935).
Este Acto señala el camino del cielo. Con él cumplimos con el mandamiento principal de la Ley: Amarás al Señor Dios tuyo con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente"... y a tu prójimo como a ti mismo.
Con este continuo Acto de Amor damos a Dios lo más excelente: que es amor a las almas. Con esta jaculatoria nos podemos comunicar constantemente con Dios. Cada hora, cada minuto, es decir, siempre que lo queremos. Y lo podemos hacer sin esfuerzo, con facilidad. Es una oración perfecta; muy fácil para un sabio como para un ignorante. Tan fácil para un niño como para un anciano; cualquiera que sea puede elevarse a Dios mediante esta forma. Hasta un moribundo puede pronunciarla más con el corazón que con los labios.
Esta oración comprende todo:
Las almas del Purgatorio, las de la Iglesia militante, las almas inocentes, los pecadores, los moribundos, los paganos, todas las almas. Con ella podemos pedir la conversión de los pecadores, la unión de las Iglesias, por la santificación de los sacerdotes, por las vocaciones del estado sacerdotal y religioso. En un acto subido de amor a Dios y a la Santísima Virgen María y puede decidir la salvación de un moribundo, reparar por mil blasfemias, como ha dicho Jesús a Sor Consolata, etc., etc.
"¿Quieres hacer penitencia? ¡Ámame!", dijo Nuestro Señor a Sor Consolata. A propósito, recordemos las palabras de Jesucristo al Fariseo Simón sobre Magdalena penitente: "Le son perdonados muchos pecados, porque ha amado mucho".
Un "Jesús, María, os amo, salvad las almas" pronunciado al levantarse, nos hará sonreír durante el día; nos ayudará a cumplir mejor nuestros deberes, en la oficina, en el campo, en la calle, etc. Se pronuncia con facilidad, sin distraerse y con agrado.
Un "Jesús, María, os amo, salvad las almas", santifica los sudores, suaviza las penas. Convierte la tristeza en alegría. Sostiene y consuela luchas de la vida. Ayuda en las tentaciones. Hace agradable el trabajo. Convierte en alegría el llanto. Fortalece y consuela en las enfermedades. Y trae las bendiciones sobre los trabajos y sobre las familias.
Un "Jesús, María, os amo, salvad las almas". Ayudará a calmar tu indignación, a convertir tu ira en mansedumbre. Sabrás mostrarte benévolo al que te ofende. Volver el bien por el mal. Conduce a efectos nobles; palabras verdaderas, obras grandes y sacrificios heroicos, iluminará tu entendimiento con luces sobrenaturales; estimulará el bien, retraerá el mal. Obtendrá el arrepentimiento al pecador; en el justo avivará la fe y le hará suspirar por la felicidad eterna.
Dios merece ser amado por ser nuestro Sumo Bien. Esta Jaculatoria es un dulce cántico para Jesús y María.
¡Cuán dulce es repetirlo frecuentemente! ¡Cuán agradable es avivar el fuego de amor a Dios!
Y habiéndolo pronunciado millares de veces durante tu vida, ¡cuán alegre será tu hora de la muerte, y qué gozosa volará tu alma al abrazo de Jesús y María en el cielo!
Dijo Jesús a Sor Consolata:
"Recuerda que un Acto de amor decide la salvación eterna de un alma y, vale como reparación de mil blasfemias. Sólo en el cielo conocerás su valor y fecundidad para salvar almas".
"No pierdas tiempo, todo Acto de amor es un alma". Cuando tengas tiempo libre y no tengas otra cosa que hacer, toma tu corona del Rosario en tus manos y a cada cuenta repite: "Jesús, María, os amo, salvad las almas"... En cuatro o cinco minutos habrás hecho pasar por tus dedos todas las cuentas y habrás salvado 55 almas de pecadores, habrás reparado por 55.000 blasfemias.
Y si esto lo repites varias veces o muchas veces al día podrás salvar centenares y miles y hasta millones de almas... Y esto sin ser misionero entre los paganos, ni predicador...
¡Cuánto consuelo en la hora de la muerte y cuánta gloria tendrás en el cielo!
Dice San Agustín: "Quién salva un alma, asegura su propia salvación", y quién salva centenares y millares y hasta millones de almas, con un medio tan fácil y tan sencillo, sin salir de su casa, ¿qué premio no tendrá en el cielo?
 Nuestro Señor le pedía a Sor Consolata que repitiera frecuentemente ese acto de amor hasta ser incesante, es decir, continuamente, porque continuamente van muchas almas al infierno porque no hay quién las salve... Repitamos todo lo que podamos esta Acto de amor: "JESUS, MARIA, OS AMO SALVAD LAS ALMAS", para que sean muchas las almas que arranquemos al infierno para hacerlas felices eternamente en el cielo. Las almas que salvamos con este Acto de Amor, será un día nuestra corona de gloria en el cielo.
Cuando uno está ocupado con trabajos manuales, se puede repetir este Acto de Amor con la mente y tiene su mismo valor como lo dijo un día Nuestro Señor Jesucristo a Sor Consolata.
Ha habido almas que han salvado varios millones de almas, con este medio tan sencillo...
Y nosotros por qué no podríamos hacer lo mismo en lugar de perder un tiempo tan precioso en charlas inútiles; repitamos frecuentemente este Acto de Amor, y así acumularemos tesoros preciosísimos para el Cielo.

 "JESUS, MARIA, OS AMO, SALVAD LAS ALMAS":
-por la Iglesia y por el Papa
-por la santificación de los sacerdotes
-por las almas del Purgatorio
-por los agonizantes
-por los que se confiesan sacrílegamente
-por los que no asisten a misa los domingos
-por los misioneros
-por los enfermos
-por la conversión de los pecadores
-por la mayor santificación de los justos
En las dudas, en las tentaciones.
En las dificultades de la vida, Por algún intención en particular.

Podemos enseñarlo también a nuestros amigos y parientes que lo recen, que lo propaguen. Gran alivio sentirá el moribundo si se le sugiere al morir.
Al levantarnos sea nuestro pensamiento. Al acostarnos nuestra última oración.
Los que se salvaron están en el cielo por haber amado a Dios. Los grados de gloria en el cielo se miden por la intensidad del amor que las almas practicaron en la vida.
Sólo entonces nos daremos cuenta de lo que vale un Acto de Amor y de su fecundidad en salvar almas.

Sor Consolata le pidió un día a Jesús: "Jesús enséñame a orar". Y he aquí la Divina respuesta: " 
¿No sabes orar?" ¿Hay acaso oración más hermosa y que sea más grata que el Acto de Amor?